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Las buenas prácticas en las cadenas productivas del Grupo Palmas
En los últimos años, se ha desarrollado una tendencia global en el mercado de alimentos, donde los consumidores y las empresas, exigen que los proveedores de aceite de palma cumplan con estrictos estándares de sostenibilidad.
Esta exigencia, alcanza tanto a las empresas palmeras como a sus cadenas productivas, donde Grupo Palmas marca un hito con la obtención de la membresía RSPO (Mesa Redonda sobre Aceite de Palma Sostenible) por parte del grupo de productores independientes de la Asociación de Productores de Palma de Santa Lucía (Tocache, región San Martín) en Perú.
El fortalecimiento de cadenas productivas se ha convertido en un enfoque importante de fomento productivo. Para asegurar una producción sostenible es importante el uso responsable de los recursos naturales, evitando el impacto negativo en el ambiente y respetando los derechos y medios de vida de las poblaciones locales.
Un ejemplo es el trabajo de Grupo Palmas, empresa agroindustrial peruana, a través de su programa de Cadenas Productivas, que trabaja con los productores de San Martín, Loreto y Ucayali. Este es un modelo de negocio con enfoque inclusivo, el cual tiene al productor como eje de su estrategia y ofrece valor a través de diversos servicios orientados a la profesionalización de la cadena de palma. Los agricultores son vistos como clientes, mas no como proveedores. Estos servicios hacen incidencia en la productividad del campo del palmicultor y gestión de su negocio, teniendo como resultado: mejores prácticas agrícolas, mejor rendimiento productivo, mejor calidad de fruto y mejores ingresos para los palmicultores.
BUENAS PRÁCTICAS PARA LA SOSTENIBILIDAD
En el Perú, más del 70% de la producción de palma está a cargo de pequeños productores independientes. Por ello, lograr la profesionalización del agricultor, alineados a los estándares de la RSPO, es clave para sostener este crecimiento. En esta línea, Grupo Palmas, principal productor peruano, viene impulsando la incorporación de criterios de sostenibilidad en sus cadenas productivas de las regiones de San Martín, Ucayali y Loreto.
Desde el 2018, once productores de la región amazónica de San Martín, iniciaron el recorrido para mejorar sus prácticas de cultivo de palma aceitera e incorporar criterios de sostenibilidad en todas las fases de su producción, en un total de 303.81 hectáreas en conjunto, donde se ha emprendido con firmeza un viaje hacia la sostenibilidad.
El Grupo Palmas, cuenta con la certificación en Principios y Criterios RSPO desde el 2022, a través de su programa de Cadenas Productivas, asumió el rol de Gestor de Grupo y, junto con la Federación Regional de Palma Aceitera de San Martín (FREDEPALMA), brindan asistencia a los productores en todas las etapas de la certificación y así consolidarse como el primer grupo de productores de palma sostenible del país.
Esta membresía del estándar RSPO permitirá que los productores tengan mayores oportunidades de acceder a más mercados internacionales de los cuales Grupo Palmas también tiene acceso. Esto implica que sus ingresos económicos aumenten, así como la calidad de vida de ellos y sus familias. De esta manera, Grupo Palmas y los productores miembros de la RSPO impulsan un mercado sostenible de palma aceitera, poniendo al país en los ojos del mundo e incentivando a más productores a apostar por la sostenibilidad que trae importantes beneficios para la región.
Hay que destacar que entre los compromisos asumidos por la Asociación de Productores de Palma Santa Lucía, está el asegurar la legalidad de sus parcelas y respetar los derechos de las comunidades; aplicar buenas prácticas agrícolas sostenibles que optimicen la productividad de sus cultivos; proteger los derechos humanos de sus trabajadores; proteger el ambiente, y comercializar y participar en el mercado de aceite de palma sostenible.
PIONEROS EN LA PRODUCCIÓN SOSTENIBLE DE LA PALMA ACEITERA PERUANA
El Grupo Palmas ha establecido la sostenibilidad como uno de los pilares fundamentales de su estrategia de negocio. La compañía ha implementado diversas acciones en Perú, incluyendo la publicación de su Política de Sostenibilidad en 2017, la cual compromete a la compañía a incluir a productores independientes en su cadena de suministro y garantizar su trazabilidad y sostenibilidad. Se ha convertido en la primera empresa peruana en obtener la certificación RSPO bajo el estándar de Principios y Criterios, y ahora impulsa la membresía RSPO para los productores de San Martín que forman parte de su Cadena Productiva. De esta manera, genera valor compartido con el productor, compartiendo su experiencia y conocimiento para lograr su profesionalización.
Cumpliendo con los principios de la Política de Sostenibilidad de la compañía, en el 2018, Grupo Palmas, con el apoyo de Earthworm Foundation, realizó el primer estudio en Latinoamérica, a nivel de paisaje, de Altas Reservas de Carbono (ARC) y Altos Valores de Conservación (AVC), en Tocache (San Martín). Gracias al Programa de Cadenas Productivas, y con la información de los estudios ARC/AVC, los productores aseguran una producción sostenible aplicando buenas prácticas agrícolas, asegurando así el cuidado del medioambiente.
LAS LECCIONES APRENDIDAS
El compromiso y la disposición al trabajo en equipo de las instituciones participantes (comunidad, gobiernos locales y regionales, empresa), así como de los agricultores de diferentes escalas que participan en ellos, con la visión de crecer juntas como una cadena unida, orientada al mercado internacional. Esta orientación debería conducir a construir alianzas entre los sectores público y privado. En el caso del sector público, el principal aporte consiste en la formulación de políticas o creación de condiciones favorables para el desarrollo de las cadenas productivas apoyadas. El sector privado permite el engranaje entre empresas de diferentes escalas, así como la instrumentación de una estrategia comercial.
Además, el valor que brinda la certificación RSPO a los productores es amplio y se traslada a 3 ámbitos. En lo económico, contar con una cadena de suministro sostenible es de principal interés para la industria de alimentos internacional. Esto implica que un productor certificado, tiene mayor posibilidad de vender su producción a más empresas y generar mayores ingresos. En ámbito social, se demuestra que es posible desarrollar palma de manera responsable con agricultores peruanos e incluso ser avalado por el más grande estándar de sostenibilidad en el mundo. Finalmente, en lo ambiental, los productores fortalecen sus capacidades para un mejor control de su producción, aprenden sobre buenas prácticas agronómicas, gestión de residuos sólidos y manejo adecuado de agroquímicos.
